Se nos ha pasado la semana, ¡qué le vamos a hacer! Pero nos puede servir para recordar que la PAZ se construye, no llega por sí sola.
Las naciones que nos llamamos «desarrolladas» sustentamos parte de nuestra economía en la producción y exportación de estos «juguetes» que sirven para alimentar odios, buscar la riqueza, el poder, y para matar. Para deshacerse del «enemigo», del que es distinto de mí, del que piensa distinto de mí (de mí, de nosotros).
El Estado mantiene medidas estrictas de control para el uso de armas en el territorio, pero poco le importa el uso que hacen de ellas en otros países. Al fin y al cabo sirven para «engordar» las arcas, y para que todas nosotras y todos nosotros vivamos un poco mejor.
Desde hace ya tres cursos CONFER, junto con Justicia y Paz (Comisión Pontificia) y La Organización AEFJ (Africa Europa Fe Justicia) llevan a cabo un grupo de trabajo con el título «Cultiva la paz. No a las armas» con el que pretenden conocer y dar a conocer temas relacionados con el comercio de armas en el mundo, el militarismo, el armamentismo, etc.
Aquí podéis descargar un documento y un power point realmente interesantes sobre «El comercio de armas en la región de los Grandes Lagos». Te pueden servir de reflexión.