La declaración de culpabilidad de Thomas Lubanga por reclutar y alistar niños y niñas menores de 15 años como soldados en República Democrática del Congo, demuestra que la Corte Penal Internacional puede hacer que los peores delincuentes del mundo respondan ante la justicia.
La sentencia es un paso histórico en la lucha contra la impunidad, y envía un mensaje claro a otras personas que cometen el espantoso crimen de usar menores soldado dentro y fuera del campo de batalla.
Desde Amnistía Internacional siempre hemos creído en la justicia internacional y hemos apoyado la labor de la Corte Penal Internacional, y por eso la condena a Lubanga es una buena noticia que quiero compartir contigo.
Sin embargo, la Corte Penal Internacional tiene otras 11 órdenes de detención pendientes contra criminales como el señor de la guerra Joseph Kony, acusado de utilizar menores soldado en Uganda, o el presidente de Sudán Omar al-Bashir, acusado de genocidio y otros crímenes en Darfur.
La mejor manera de celebrar esta primera condena es seguir apoyando la justicia internacional a través de una petición al Secretario General de la ONU Ban Ki-moon.
Por favor, firma la petición de Amnistía Internacional ahora.