En este mundo de sobreabundancia y despilfarro el dicho tradicional “la comida no se tira”, con el que nuestras madres nos hacían pensar cuando nos quejábamos del plato que odiábamos, ha perdido el “no” y ha acabado convirtiéndose en una dolorosa realidad. En 2011, en España se tiraron a la basura 163 kg de alimentos por habitante. Esa cifra nos coloca en el sexto puesto del vergonzoso ranking europeo. En el continente se despilfarra una media de 179 kg por persona o, lo que es igual, el pasado año se tiraron a la basura 89 millones de toneladas de alimentos. Mejor no pensar en la cantidad de seres humanos del sur del planeta que hubieran sobrevivido con lo que en el viejo continente desperdiciamos.
Así comienza el artículo de José Luis Corretjé. Podéis leer el artículo completo en la revista Alandar.
Y para las y los que tengáis más tiempo, «Los espigadores y la espigadora«, película documental de una duración de 82 minutos. Las y los espigadores eran aquellas personas que iban recogiendo lo que había quedado después de la recogida de la cosecha (vendimia, patatas…). Esta película, escrita y dirigida por la francesa Agnés Varda (2000) nos cuenta la historia de espigadores urbanos actuales, que viven de lo que otras personas desechan.